¿Qué es la cirugía de vesícula?
La cirugía de vesícula, también conocida como colecistectomía, es un procedimiento quirúrgico que implica la extirpación de la vesícula biliar. La vesícula es un órgano pequeño que se encuentra debajo del hígado y que almacena la bilis, un líquido producido por el hígado que ayuda en la digestión de los alimentos.
La cirugía de vesícula se realiza en casos de enfermedades de la vesícula, incluyendo cálculos biliares, inflamación de la vesícula, infecciones y cáncer. En la mayoría de los casos, se realiza mediante cirugía laparoscópica, que es un procedimiento menos invasivo en el que se realizan pequeñas incisiones en el abdomen y se utiliza un laparoscopio para extirpar la vesícula.
Tipos de cirugía de vesícula
Hay dos tipos principales de cirugía de vesícula: la cirugía laparoscópica y la cirugía abierta.
Cirugía laparoscópica
La cirugía laparoscópica es un procedimiento menos invasivo en el que se realizan pequeñas incisiones en el abdomen y se utiliza un laparoscopio para extirpar la vesícula. Este tipo de cirugía es la opción preferida en la mayoría de los casos, ya que es menos dolorosa, tiene una recuperación más rápida y tiene menos complicaciones que la cirugía abierta.
Cirugía abierta
La cirugía abierta es un procedimiento más invasivo en el que se realiza una incisión más grande en el abdomen para extirpar la vesícula. Esta opción se utiliza en casos en los que la cirugía laparoscópica no es posible, como cuando se tienen complicaciones durante la cirugía laparoscópica.
Preparación para la cirugía de vesícula
Antes de la cirugía de vesícula, es importante que le informes a tu médico sobre cualquier medicamento que estés tomando, incluyendo suplementos o hierbas. Además, deberás realizarte algunos análisis de sangre, una ecografía y un electrocardiograma para asegurarse de que seas un buen candidato para la cirugía.
También deberás ayunar durante al menos 8 horas antes de la cirugía y dejar de tomar cualquier medicamento que pueda afectar la coagulación de la sangre. En la mayoría de los casos, se te administrará anestesia general antes de la cirugía, por lo que deberás asegurarte de que alguien te acompañe al hospital y te lleve de vuelta a casa después de la operación.
Riesgos de la cirugía de vesícula
La cirugía de vesícula es un procedimiento seguro en la mayoría de los casos, pero como en cualquier procedimiento quirúrgico, hay algunos riesgos asociados. Algunos de los riesgos más comunes incluyen infección, sangrado, lesiones en la vesícula biliar y lesiones en los vasos sanguíneos.
Además, se pueden presentar complicaciones durante la cirugía, como lesiones en los órganos cercanos, como el hígado o el páncreas, o problemas respiratorios relacionados con la anestesia.
Recuperación después de la cirugía de vesícula
La mayoría de las personas pueden dejar el hospital el mismo día o al día siguiente de la cirugía de vesícula. Se recomienda que te tomes al menos una semana de descanso para permitir que tu cuerpo se recupere adecuadamente.
Cuidado posterior
Es importante cuidar la incisión y mantenerla limpia y seca. Si experimentas fiebre, dolor o enrojecimiento en la incisión, debes comunicarte de inmediato con tu médico. También deberás seguir una dieta baja en grasas y alta en fibra para ayudar a tu cuerpo a adaptarse a la falta de la vesícula biliar.
En general, la cirugía de vesícula es un procedimiento quirúrgico común y seguro que puede ayudar a aliviar el dolor y otros síntomas asociados con enfermedades de la vesícula. Si te han diagnosticado con alguna enfermedad de la vesícula, habla con tu médico sobre si la cirugía de vesícula es la mejor opción para ti.