La fimosis en adultos: tratamiento alternativo a la cirugía
¿Qué es la fimosis en adultos?
La fimosis es una afección que se presenta cuando el prepucio no se puede retraer completamente debido a un estrechamiento del orificio prepucial. Esta situación puede provocar dolor y dificultad para realizar algunos actos cotidianos como orinar y mantener relaciones sexuales, especialmente cuando se trata de la fimosis en adultos.
El problema afecta a hombres de todas las edades, pero se presenta con mayor frecuencia en la adolescencia e infancia temprana. Un gran número de pacientes menores de edad logran superar la fimosis sin ningún tipo de tratamiento, pero la situación es diferente cuando se trata de la fimosis en adultos, ya que puede ser más difícil de tratar sin la necesidad de una intervención quirúrgica.
Tratamientos no quirúrgicos para la fimosis en adultos
1. Tratamiento con cremas corticoides
La utilización de cremas corticoides suelen ser una primera opción para tratar la fimosis en adultos. Estas cremas tienen un efecto que hace disminuir el tejido que se encuentra en la parte interna del prepucio, con lo que se genera una relajación en la estrechez del prepucio. Este tratamiento suele durar entre cuatro y ocho semanas, dependiendo de la gravedad de la fimosis.
2. Dilatación manual
La dilatación manual puede hacerse con la ayuda de los dedos y de forma progresiva. Consiste en la aplicación de un lubricante en la zona del pene y aplicar una fuerza suave para apliar suavemente el orificio del prepucio. Esta técnica es eficaz, pero requiere una mayor dedicación y esfuerzo por parte del paciente para lograr resultados.
3. Estiramientos
Los estiramientos también son una alternativa para tratar la fimosis en adultos. Al igual que la dilatación manual, la técnica consiste en la aplicación de un lubricante y la realización de movimientos circulares en el prepucio para estimular la piel. Esta técnica también suele llevarse a cabo durante un tiempo determinado, entre cuatro y ocho semanas, para lograr resultados.
4. Técnicas no manuales
Para las personas que no pueden o no quieren realizar los procedimientos manuales para tratar su fimosis en adultos, existen opciones MÁS avanzadas. El uso de dispositivos especiales como los anillos de estiramiento y los receptores suaves podrían ser útiles.
En general, los tratamientos no quirúrgicos para la fimosis en adultos suelen ser menos invasivos y más económicos que los procedimientos quirúrgicos. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada caso es único y que, por lo tanto, puede requerir un tratamiento diferente para lograr resultados efectivos.
La higiene y cuidado del pene
Independientemente del tratamiento que se elija para tratar la fimosis en adultos, también es fundamental llevar a cabo una adecuada higiene del pene para prevenir infecciones y complicaciones. Los pacientes deben lavar la zona con agua tibia y jabón suave regularmente, y evitar la utilización de productos que puedan provocar irritaciones. También es importante mantener una buena hidratación de la zona, aplicando cremas hidratantes especiales para la zona íntima.
1. Métodos naturales
Además de los cuidados básicos de higiene, existen algunos métodos naturales que pueden resultar de gran ayuda para mantener la salud del pene y contribuir a la recuperación de la fimosis. Estos métodos incluyen la bañera de manzanilla, baños de vapor y compresas de agua caliente.
2. Uso de lubricantes
Los lubricantes pueden servir para aliviar el dolor y mejorar la movilidad del prepucio. Perfumes y otros productos químicos pueden causar irritaciones.
3. Ejercicios de estiramiento y fortalecimiento
Existen algunos ejercicios específicos que pueden ayudar a estimular el crecimiento natural del prepucio, y también a fortalecer los músculos del pene. Estos ejercicios involucran la contracción y relajación de los músculos del suelo pélvico, y pueden ser de mucha ayuda para los pacientes que sufren de fimosis en adultos.
¿Cuándo se recomienda la cirugía?
En algunos casos, los tratamientos no quirúrgicos pueden no ser suficientes para curar la fimosis en adultos y podría ser necesario recurrir a una intervención quirúrgica. La técnica más común utilizado por los médicos es la circuncisión, pero debe evaluarse caso por caso.
1. Cuando otros tratamientos han fallado
Solo si el tratamiento no quirúrgico no consiguió aliviar los síntomas de fimosis en adultos, se podría acceder a la cirugía. La decisión de proceder o no al acto quirurgico dependerá de cada caso y cada paciente, y debe ser tomada siempre en consulta con su médico de confianza.
2. Por razones medicas relevantes
Es posible que la circuncisión sea necesaria si el prepucio produce complicaciones recurrentes, por ejemplo, episodios infecciosos graves.
3. Atendidos especiales
En casos especiales como la fimosis en adultos pacientes con autismo, la cirugía podría ser necesaria ya que pueden tener dificultades para realizarse cuentas de la higiene íntima o para tolerar la manipulación del miembro.