Recuperación de Menisco sin Cirugía



Causas del desgarro de menisco

El menisco es un cartílago situado en la rodilla que se encarga de amortiguar los impactos que se producen cuando caminas, corres, saltas… Este cartílago tiene un gran poder de absorción de impactos y, por ello, está sometido a mucho estrés. Por tanto, cualquier movimiento brusco como torcerse la rodilla o caerse con las piernas extendidas puede provocar un desgarro de menisco.

Este desgarro suele afectar, especialmente, a deportistas, aunque cualquier persona puede sufrirlo por un mal gesto en su día a día. Lo más común es que el desgarro se produzca en la parte externa del menisco, ya que es la zona que cuenta con menos irrigación sanguínea. Esto hace que sea más complicado recuperar la lesión sin cirugía.

Síntomas de un desgarro de menisco

Es muy importante conocer los síntomas de un desgarro de menisco para un diagnóstico precoz y, así, poder comenzar la recuperación sin necesidad de cirugía. En primer lugar, lo más común es sentir un fuerte dolor en la parte interna o externa de la rodilla. Si además, notas una sensación de bloqueo, rigidez y dificultad para realizar movimientos básicos como caminar o flexionar la rodilla, es muy probable que tengas un desgarro de menisco.

Además, es común sentir dolor al tacto y, en algunos casos, puede producirse inflamación. Por tanto, si notas alguno de estos síntomas, debes acudir a un especialista para que examine tu rodilla y determine el tratamiento adecuado para el desgarro de menisco que has sufrido.

¿Has visto esto?  Quistes en los ovarios cirugia laparoscopica

Tratamientos disponibles para recuperar el menisco

En función de la gravedad del desgarro de menisco, el especialista podrá recomendarte diferentes opciones de tratamiento para recuperar la lesión. Si el desgarro es leve, es posible que el médico te recomiende un tratamiento conservador sin necesidad de cirugía. En cambio, si el desgarro es más grave, es probable que se necesite una operación.

El tratamiento conservador incluye una serie de pautas que debes seguir para recuperar el menisco sin cirugía. Estas pautas pueden incluir descanso, fisioterapia, medicación para el dolor e inflamación, y ejercicios específicos para fortalecer la musculatura que rodea la rodilla. El objetivo es reducir el dolor y recuperar el movimiento de la rodilla de forma progresiva aunque sin forzar demasiado.

Recuperación de menisco sin cirugía

La recuperación de un desgarro de menisco sin cirugía puede variar en función de la gravedad de la lesión. En cualquier caso, es muy importante llevar a cabo un tratamiento conservador para recuperar el menisco sin necesidad de cirugía. Además, el propio paciente puede llevar a cabo una serie de medidas para acelerar la recuperación.

Medidas para acelerar la recuperación

Lo primero que debes hacer es aplicar hielo en la zona afectada para reducir la inflamación. El hielo también ayuda a reducir el dolor. Lo más recomendable es aplicar hielo varias veces al día durante entre 15 y 20 minutos cada vez.

Otra medida muy efectiva para acelerar la recuperación de menisco sin cirugía es usar una rodillera. Estos dispositivos ayudan a reducir la inflamación y el dolor, a estabilizar la rodilla y a mejorar el apoyo. Es muy importante que antes de comprar una rodillera consultes con tu especialista para que te recomiende la más adecuada para tu caso.

¿Has visto esto?  Abdominoplastia sin cirugia

Finalmente, es importante llevar a cabo los ejercicios de fisioterapia y rehabilitación que te haya recomendado el especialista. Con ellos conseguirás mejorar la movilidad de la rodilla y recuperar la fuerza muscular. Estos ejercicios suelen ser específicos para cada lesión y se adaptan al estado del paciente.

Ejercicios para recuperar el menisco

Ejercicios básicos

A continuación te indicamos una serie de ejercicios básicos que puedes llevar a cabo en casa como tratamiento para recuperar el menisco sin necesidad de cirugía. Estos ejercicios te ayudarán a reducir el dolor y la inflamación, a mejorar la movilidad de la rodilla y a fortalecer la musculatura.

  • Estiramiento de cuádriceps: Consiste en sentarte en el suelo con las piernas estiradas y, a continuación, elevar un pie con la ayuda de las manos hasta llevarlo cerca del glúteo. Aguanta esta posición durante 15 segundos y repite con la otra pierna.
  • Estiramiento de los isquiotibiales: Acuéstate en el suelo boca arriba con las rodillas dobladas y coloca tus manos detrás de las piernas. Estira lentamente las piernas hacia el suelo y mantén la postura durante 15 segundos. Luego, vuelve a la posición inicial y repite el ejercicio.
  • Elevación de piernas: Siéntate en una silla con la espalda recta y los pies apoyados en el suelo. A continuación, levanta lentamente una pierna hasta formar un ángulo de 90 grados con la rodilla. Mantén la postura durante 10 segundos y luego baja la pierna. Repite con la otra pierna.
  • Elevación de talón: Siéntate en una silla con la espalda recta y los pies apoyados en el suelo. A continuación, eleva los talones del suelo al máximo que puedas y mantén la postura durante 10 segundos. Luego, baja los talones y repite el ejercicio.
  • Caminar en cuclillas: Colócate en posición de cuclillas y camina hacia delante manteniendo esta postura. Si te resulta demasiado difícil, puedes apoyarte en una pared para hacer este ejercicio.
¿Has visto esto?  Cirugia cornetes nasales

Ejercicios avanzados

Estos ejercicios se utilizan en una fase más avanzada de la rehabilitación y es importante que los realices bajo la supervisión de un fisioterapeuta para evitar lesiones. Los ejercicios avanzados están destinados a recuperar la fuerza muscular y la flexibilidad, y están especialmente indicados para personas que practican deporte.

  • Caminata hacia atras: Colócate de espaldas contra una pared y comienza a caminar hacia atrás con las rodillas ligeramente flexionadas.
  • Sentadilla con pesas: Coloca una pesa en la parte superior del pecho y, a continuación, realiza una sentadilla con la espalda recta y los talones en el suelo. Repite este ejercicio durante varios minutos.
  • Ejercicio de deslizamiento lateral: Colócate de lado junto a una pared y deslízate hacia delante y hacia atrás mientras te apoyas en la pared con una mano.

Conclusión

En definitiva, si sufres un desgarro de menisco, es importante realizar un tratamiento adecuado para recuperar la lesión sin necesidad de cirugía. Esta recuperación puede ser algo larga pero con constancia y esfuerzo, conseguirás volver a la normalidad. Recuerda llevar a cabo los ejercicios de fisioterapia y rehabilitación que te haya recomendado el especialista, y no dudes en seguir algunas medidas para mejorar la recuperación como la aplicación de hielo, el uso de rodilleras o la realización de ejercicios específicos.

Creado por: [nombre del creador] – Septiembre 2021


Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad